Las cosas que te conté cuando no podía contarte nada.

Tengo demasiadas cosas que decirte.

Hace un tiempo comencé a escribir en un diario vulnerabilidades de amor. Dicen que escribir es bueno para conservar la buena salud emocional, así que me encargué de curarme derramando pedacitos de mi corazón en un papel. Pero me di cuenta que no estaba escribiendo para mí, sino para ti.

Mi diario privado se convirtió en diálogos contigo. En todas las veces al día que deseo decirte que “Te Amo” o que “Te extraño” o que “Quiero comerte a besos hasta dejarte sin cachetes” o que “Te ruego que me sigas esperando porque voy volando en tu dirección”.

Así que aquí construí una caja torácica virtual donde guardar todas esas palabras, vivencias, pensamientos, memorias y sueños de mi corazón. Escribiré aquí tanto como pueda, probablemente a diario. Entra y lee cuando quieras, preferiblemente a diario.

Cada una de mis palabras te pertenece. Cada pedacito de mi corazón te pertenece. Aquí te dejo todos esos Pedacitos de Fer. Ahora son pedacitos de ti.

Tu enamoradísimo novio,

Gabriel Alejandro